Ir al contenido principal

De mi nacimiento. (Pero no recuerdo nada)

Nací el 29 de enero de 1895 en la frontera con Uruguay. Mi padre, João da Silva Torelly, era hijo de un italiano y de una gaucha descendiente de portugueses y mi madre, Maria Amélia Brinkerhoff Torelly, era una india charrúa uruguaya de padre norteamericano de descendencia rusa. Por eso suelo decir que "soy una auténtica 'Liga de las Naciones'".
En aquel tiempo, cuando por cualquier lado aún quedaban restos de la Colonia Cisplatina, un viaje de Río Grande a Uruguay era una aventura; pero mi madre quería tener el parto en la granja de mi abuelo. Mis padres tomaron un barco y fueron a Yaguarón. De allí, en balsa, pasaron a Artigas y, desde allí, hasta la hacienda de mi abuelo, viajaron en diligencia. A mitad de camino, una de las ruedas se partió y provocó un tremendo accidente. Mi madre se llevó un buen susto y yo vine a ver, por curioso, lo que estaba sucediendo. Tuve suerte. Cerca había un rancho con una matrona, que también era adivina. Ayudó en el parto y de regalo leyó la suerte y realizó profecías. Pero no recuerdo nada.
Ernani Ssó 1



Mi bautizo

Me bautizaron el año siguiente a mi nacimiento, en la Capilla de Nuestra Señora del Carmen de Río Grande. Mis padrinos fueron mi tío Firmino y su esposa, mi tía Albertina2 . Esto, a la postre, no reportaría más importancia si no fuera porque, posteriormente, sería mi tío Firmino, abogado de formación y líder del Partido Federalista, quien tomaría la responsabilidad sobre mi educación. Pero previamente se concatenaron ciertos sucesos, algunos muy trágicos.

El suicidio de mi madre

Cuando apenas contaba con dieciocho meses de vida, mi madre, con dieciocho años, se suicidó. Los periódicos de la época describieron suceso del siguiente modo: "Ayer, a las 7 de la noche, puso fin a sus días, disparándose un tiro con un revólver en la cabeza, la Exma. Sra. D. Amélia Brinkerhoff Torelly, esposa del Sr. João da Silva Torelly." Y el ‘Eco do Sul’ añadía: "La desdichada muchacha, que tenía conductas suicidas, disparó el revólver sobre el lado derecho de su cráneo, saliendo la bala en la parte superior de la cabeza. D. Amelia era natural de la República Oriental del Uruguay, tenía 18 años de edad y dejó dos niños huérfanos." Pero a mi no me gusta hablar de ello.

Mi padre que había perdido un brazo luchando al lado de los maragatos en la Revolución Federalista (1893-1895), no tenía cómo cuidarme. Por eso, me envió a la hacienda de mi abuelo materno, Juan Brinkerhoff, en Uruguay, donde quedé bajo cuidado de mis tías. Este fue un período muy importante para mi formación:

El hombre es el producto del medio, ¿no? Todo era de mi curiosidad, curioseaba en las revistas inglesas de mi abuelo y vivía en contacto con la naturaleza. Aprendí primero el español. Mis primeros amigos fueron mi cachorro Talismán y un petiso(1) zaíno(2) pampa(3) que mi abuelo me dio. El petiso me obedecía ciegamente, sólo me llevaba a donde yo quería. Hoy entiendo que mi petiso practicaba el dicho aquel: 'Amor con amor se paga.'
Ernani Ssó 3 y Cláudio Figueiredo 4













Referencias:

1 - 3 O Barão de Itararé, Ernani Ssó, Porto Alegre, 1984.
2 - 4 As duas vidas de Aparício Torelly. O Barão de Itararé, Cláudio Figueiredo, Editora: Record, 1987.

Notas:

(1) Caballo de poca alzada, más grande que el poni.
(2) Caballo castaño oscuro.
(3) Caballo con la mayor parte de la cara blanca.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El hígado hace mucho daño a la bebida.

El hígado hace mucho daño a la bebida. # Apporelly

Hay, seguramente, un placer en ser loco que sólo los locos conocen.

Hay, seguramente, un placer en ser loco que sólo los locos conocen. # Apporelly